- Edificio: Chrysler, el hotel Standard, la Biblioteca Pública y la estación de Grand Central (imprescindibles las ostras y un cocktail en The Campbell Apartment!)... y mi casa!
- Museo: Met, sin duda!! El MoMA también merece la pena y lo mejor del Frick es el edificio y soñar vivir en esa casa rodeada de semejantes obras de arte… pero sabiendo ahora lo que es, creo que merece la pena madrugar un domingo para no pagar la entrada :)
- Restaurante para cenar: Buddakan y La Esquina (el de arriba para cenar y abajo –la brasserie- para tomar un cocktail con R&B dosmilero del bueno).
- Restaurante para brunch: Creo que mi respuesta es obvia: Félix!!! Los mejores huevos Benedict sin duda, pero el resto de la carta nunca defrauda! Los cocktails están buenísimos, el servicio fantástico y el ambiente… como para repetir uno y otro domingo.
Por destacar algún otro sitio: Cookshop, donde me he tomado el mejor Bloody Mary, y Café Mogador, en el Lower East.
- Cocktail: Los cocktails de lichis!! Creo que el más rico de todos es el de Morimoto, pero le siguen muy de cerca el de Buddakan, el del bar del Mandarin Oriental (con vistas a Columbus Circle) y ya por detrás, el de Sushi Damo y Breeze.
- Lugar: Sheep Meadows, en Central Park. Me alegro de haber comprado una mantita en Bed, Bath & Beyond, como me recomendaron Patricia e Íñigo, para poder estar tumbada ahí horas leyendo (aunque Tamara no me crea). La mantita especial que venden aisla de la humedad y es lo más cómodo del mundo!!
- Otros: La primera vez que ves el skyline, en el taxi desde JFK. Poder ir andando a la oficina, bajando por Broadway (aunque acabes asqueada de “los turistas”, que ni miran por dónde van). Vivir cerca de tus amigos y hacer planes en cualquier momento, todos los días que te apetezca. Pasear sin rumbo fijo. Tomar a deshora una hamburguesa de Shake Shack con un concrete de fresa y plátano en Madison Park. En verano, después de visitar el Met, tomar un cocktail en la terraza que tienen con vistas a Central Park mientras ves la puesta de sol. En verano tomarte unas cervezas en Frying Pan. Hacerte manicura y pedicura perfecta y super barata (es lo único más barato que en Madrid). Las cupcakes. Sobrevivir al huracán Sandy... y a los domingos en Félix. MIS AMIGOS AHÍ. El concierto de Jay-Z en el Barclays Center.
- Para el siguiente viaje: Otra visita al Met, que me falta mucho por ver. Los Hamptons. Leadbelly. Southside y Greenhouse (al final no he salido a muchas discotecas!).
- Algo que te haya sorprendido para bien: Yo pensaba que Nueva York sería una ciudad muy deshumanizada, en la que cada uno va a su bola y si estás sólo estás MUY solo. Al final mi sensación es justo la contraria: es una ciudad en la que rápidamente te sientes como en casa, ubicada. Todo es fácil y la gente es muy agradable: en los restaurantes, en las tiendas… hasta en la calle. Si tienes cara de no saber muy bien dónde vas, rápidamente alguien te ofrece ayuda. Los desconocidos se ponen a hablar contigo.
En cuanto a la experiencia... yo pensaba siempre que desde un punto de vista profesional, era una oportunidad única y no era muy consciente de lo que iba a suponer a nivel personal. No sabía qué me esperaba. Este ha sido un año increíble, creo que clave para mí. Me lo he tomado como un regalo por los esfuerzos del pasado, como una inyección de ánimo y de alegría. He sido MUY FELIZ y he conocido a amigos increíbles, con los que he hecho mil planes diferentes, pasando momentos que espero que nunca olvide (si no, siempre puedo volver a ver el blog...!).
- Algo que te haya sorprendido para mal: La cantidad de locos y/o homeless. Es horrible. Y la basura por la calle.
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